viernes, diciembre 09, 2005

Regalos en el kiosko

Estos días ha salido la noticia de que la revista francesa Jalousse regalaba a sus lectoras nada más y nada menos que un vibrador, forma fina de decir "consolador" e incluso "dildo", aunque al parecer, este último término sólo debe emplearse para referirse a los consoladores de grandes dimensiones. Y he aquí el dilema: ¿dónde empieza lo grande y termina lo pequeño? Eso, querido lector, lo dejamos a su sano (esperemos) juicio.
La revista se ha distribuido en dos versiones: la normal y la que trae el regalito. La diferencia de precio era de tan sólo un euro, aunque, eso sí, esta venía dentro de una bolsa opaca para que nadie se ofendiera al ver semejante pato-aparato. Pero claro, digo yo, ¿qué más da que no se vea si se anuncia por fuera? Nunca entenderé estas cosas. Por supuesto, las existencias se han agotado enseguida. ¿Quiere eso decir que las francesas están necesitadas? ¿O acaso esto prueba que esas revistas destinadas a la mujer, como Cosmopolitan, Marie Claire, y demás tienen más lectores homosexuales que la propia ZERO? Bueno, vale, los consoladores no son patrimonio exclusivo de los gays (aunque parece que de los dildos sí). Ejem.
La revista ha anunciado su aparición en España durante el próximo año. Habrá que ver el regalo que hacen con el primer número, porque, querido lector, ¿no te has dado cuenta de que ir al kiosko a comprarte la Telva ya no es lo que era? Ahora que uno ya se había acostumbrado a que para recoger el periódico de los domingos, había que ir con el carrito de la compra para poder cargar con todos los suplementos, ahora comprarte una revista puede requirir del maletero del coche. Cuando no te regalan un bolso, son unas cholas, cuando no unas gafas, o una bufanda. Eso sí, encima las ofrecen de distintos colores y la gente se compra varios ejemplares de la misma revista para tener un montón de bolsos monísimos de distintos colores. Claro que las que hacen esas cosas, son las que luego hacen la compra en el Rincón del Gourmet del Corte Inglés y reniegan del Carrefour. Qué valor.
Quizás, la propuesta más bizarra vista últimamente sea la de este mes, donde varias revistas regalan condones. Entre ellas, Fotogramas. Y digo yo: ¿qué hace Fotogramas regalando condones? La portada de la revista está dedicada a King Kong, así que uno podría esperar condones de la talla XXL, pero no, son normalitos. Al menos podría haber traído vaselina también ¿no?
Si unimos los regalos de las revistas, los bizarros coleccionables de todo tipo que podemos encontrar en lso kioskos, podemos decir que el "todo a 150" (o "todo a 1 euro") ha muerto. Podemos encontrar en nuestro kiosko desde ositos de peluches con su correspondiente fascículo hasta unas cholas monísimas de la muerte para ir a la playa. Y la gente va corriendo a comprar esas cosas, no se crea usted. Claro, que atrévase a salir a la calle con un bolso regalado por la Telva, unas gafas regaladas con la Mía y un gorro regalado con la Cosmo y luego no se queje si la señalan con el dedo por la calle. Es más, no se sorprenda si usted mismo se lo compra y señala con el dedo a otra persona por ponérselo. Que falsas hay muchas en todas partes. Claro que si alguien le señala con el dedo por follar con los condones del Fotogramas, sin duda, está usted fornicando con alguien. Puede que sea un cinéfilo, o alguien, que, como usted, se ha comprado el Fotogramas porque los condones salen más baratos así.

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